Educación: filosofía, música, fomento de la creatividad

viernes, 28 de diciembre de 2012



Aprender a conocer, a hacer, a emprender, a vivir juntos… pero, sobre todo, aprender a ser, a “dirigir la propia vida”, a actuar en virtud de las propias reflexiones.

Aprender a ser plenamente humano, es decir, dotado de las facultades exclusivas y distintivas de pensar, imaginar, prever, … crear!

En ésto consiste la auténtica educación. Lo de más son capacitaciones, formación especializada, adquisición de destrezas técnicas.

La filosofía es un pilar esencial  porque contribuye a desarrollar estas capacidades fundamentales. De todo lo que aprendí en la escuela y el instituto lo que más me ha ayudado, incluso desde un punto de vista bioquímico (Heráclito, Leibnitz), ha sido la filosofía, porque ayuda a ser “humanamente” y científicamente.

Junto al fomento de la capacidad de pensar, la de emocionarse, de sentir, de desplegar la mayor desmesura humana: la creatividad. Música, artes plásticas, literatura, poesía…

Abandonen, por favor, los proyectos educativos que se basan en ideologías, creencias, enfoques pragmáticos… que alicortan las posibilidades de despegue y vuelo alto, que reducen la libertad, don supremo de la condición humana.

“Seres libres y responsables”: en ésto consiste la educación (artículo 1º de la Constitución de la UNESCO).

Filosofía, música y arte para una educación integral.

Rindamos homenaje a José Antonio Abreu que ha conseguido, con una visión y perseverancia dignas de encomio, que hoy, en Venezuela, 400 mil alumnos, chicos y chicas de todos los lugares del país y de todas las condiciones sociales, participen en programas de educación musical completamente gratuitos. Nada une más que cantar juntos, que interpretar juntos. Si alguien duda todavía, que escuche la “Sinfonía de los mil”, la octava de Mahler, dirigida por Gustavo Dudamel.

Y lean el Comunicado de Prensa de la Conferencia Española de Decanatos de Filosofía del 14 de diciembre próximo pasado.

Son, ambos, argumentos convincentes, irrefutables.

Constitución: deber de memoria

lunes, 24 de diciembre de 2012

Los que con mayor vehemencia se oponen a cualquier modificación de la Constitución española son, en buena medida, los que menos intervinieron en hacerla posible. Parece que han olvidado o que desconocen, en particular, las circunstancias que rodearon la redacción del capítulo 8º, dedicado a la estructuración del Estado en Comunidades Autónomas. 

El auténtico encaje de bolillos que fueron capaces de llevar a cabo, con innumerables presiones, los "padres de la Constitución", permitió hacer efectiva la transición a un sistema democrático, con un pluralismo político, cultural y lingüístico encomiable, aconfesional, ... a pesar de la creciente "tensión" originada por las discrepancias de quienes, desde algunos sectores nostálgicos de las fuerzas armadas, consideraban que se había ido demasiado lejos tanto en el reconocimiento de partidos como en la delegación de competencias de gobierno a las Comunidades Autónomas. 

Y, en consecuencia, la prevista "federación", sin privilegios "históricos" para Comunidad alguna, quedó en "sinfonía inacabada" en palabras del "mago" de la transición, el Presidente Adolfo Suárez. Con su dimisión, tan dolorosa como bien calculada, trató de evitar el golpe de Estado que, de todos modos, tuvo lugar. Y no resultó, por milagro, en una auténtica tragedia. 

La Constitución no sólo deberá ponerse al día serenamente -sin el acoso de los mercados que paradójicamente, increíblemente, motivó la única reforma efectuada- sino que debe aparecer como solución y no como problema, como la Carta Magna de un Estado donde quepan todos los españoles con una gran capacidad de autogobierno y unos principios comunes bien establecidos y generalmente aceptados. 

Hay que completar ahora la "sinfonía inacabada", después de 35 años con unos resultados excelentes, en lo que a la descentralización se refiere, que no deben desvirtuar cuestiones económicas relativas a la deficiente gestión de algunas Comunidades. 

Sí: mejorar y actualizar lúcidamente, cuando haga falta, la máxima referencia jurídica del Estado. 

Completar cuando sea necesario lo que tuvo que quedar inacabado. 

Hace tiempo que debía haberse hecho, pero ahora es muy urgente. 

Deber de memoria.

Marea blanca, marea verde… procuren que no se conviertan en tsunamis

jueves, 20 de diciembre de 2012



“Cuando el río suena, agua lleva”. Cuando el personal sanitario y docente se moviliza, no minusvaloren los motivos que les llevan a mantener una actitud tan firme y continuada. Se trata de quienes desempeñan funciones que se caracterizan por su desprendimiento, su generosidad, su solidaridad humana.

Los pacientes y los estudiantes son grandes destinatarios de los responsables públicos. Todo lo que les afecta puede tener consecuencias difícilmente reversibles.

No contemplen estas “mareas” como si ustedes poseyeran la verdad y todos los esfuerzos “marinos” fueran vanos.

Escuchen, atiendan, conversen… y rectifiquen cuando deban. La salud y la educación son temas en los que la obcecación y la imposición siempre acaban perdiendo.

Ténganlo en cuenta.

Estados Unidos: ¡armas fuera!

lunes, 17 de diciembre de 2012



Se acabó el larguísimo tiempo de disculpas, de argumentos rebuscados, de tradiciones sobre la seguridad personal. Cada dos por tres, asesinatos colectivos. De forma recurrente, niños y mayores sacrificados sin que, como sucede con las drogas, nadie se atreva a modificar la inercia de lo establecido.

El negocio inmenso que se oculta tras estos hábitos que pertenecen, además, a la competencia de cada Estado, no puede seguir manteniéndose a base de nuevos sacrificios en el altar de estos “derechos constitucionales adquiridos”. Los Estados Unidos no pueden seguir dando malísimos ejemplos de esta naturaleza –al igual que sucede con la pena capital- por no ser materia de ámbito federal.

¡Armas fuera! Siempre habrá, en grandes colectivos, personas que pierden el juicio, pero corresponde al Estado asegurar, en toda la medida de lo posible, la seguridad ciudadana.

Espero que la horrenda matanza del Colegio de Newtown, en Connecticut, haga reflexionar a las autoridades y representantes de un gran pueblo  que, por intereses inconfesables, se somete a anacrónicas “costumbres”. Unos, sometidos a la presión de la Asociación del Rifle, incapaces de reaccionar, ni ante los niños muertos, por los inmensos intereses que se obtienen. Los otros, incapaces de oponerse, azorados en el funambulismo de arcos parlamentarios muy ajustados. Lo que es cierto es que los Estados Unidos no pueden seguir presentando al mundo, del que deberían ser líder, frecuentes ejemplos de esta índole.

El asesino “siguió el horrible patrón de otras masacres similares”, se dice en la prensa. “Tenía cuatro armas de fuego y vestía un chaleco antibalas”.

“En lo que va de año, el sistema nacional que contabiliza el comercio de armas –informa “El País”- ha detectado 16.300.000 ventas” (pero en cada “venta” puede figurar un número ilimitado de piezas). El año pasado, de los 14.000 asesinatos que tuvieron lugar en los Estados Unidos, 10.000 lo fueron por armas de fuego. En 2009  hubo casi 600 muertos en accidentes causados por armas y unos 19.000 suicidios con el mismo método.

El Presidente Obama, “con la mirada de un padre” y lágrimas en los ojos, hizo un llamamiento para adoptar “acciones significativas”. Tómelas, señor Presidente, sin contemplaciones para los que sólo observan estos sucesos con ojos llenos de dólares y siguen defendiendo lo indefendible, lo inadmisible. Enmiende la Segunda Enmienda en la que se escudan los cómplices de este dislate.

Y dirija después su mirada, con determinación y firmeza, hacia los niños y niñas que mueren todos los días en el desamparo y el anonimato, en el olvido mueren de hambre miles de niños todos los días… mientras la sociedad saciada mira hacia otro lado.

Aproveche esta tristísima ocasión para hacer frente a esta ignominia, a esta vergüenza colectiva.

Eurovegas: si fuera cierto lo que se dice... ilimitada oposición ciudadana

miércoles, 12 de diciembre de 2012



Al muy discutible acierto de permitir que se instale en la Comunidad Autónoma de Madrid Eurovegas, se añadiría el disparate, auténticamente intolerable, de "humillación legal", de permisividad sin límites, de "Estado fallido", que supondría autorizar a estos reconocidos depredadores internacionales una serie de actividades y comportamientos que están vedados -con buen sentido, en general- al resto de las empresas y ciudadanos.

¿"Estado de Derecho", tan cacareado, si se cambian las leyes para el buen acomodo de este gran centro lúdico internacional?

No puedo creer que sea verdad lo que se dice que van a consentir las autoridades autonómicas y nacionales... aunque tampoco creía, hace tan sólo unos meses, que se afectaran, al envite de los mercados, la sanidad, la educación y la ciencia... y no sólo se han "recortado" sino que se están desfigurando grandes logros sociales y principios democráticos.

Vayan con tiento -señores Presidente del Gobierno y de la Comunidad- porque hincarse ante estos potenciales "retornos monetarios" produciría tal sonrojo en la mayoría del pueblo que podría ser el detonante de una auténtica rebelión ciudadana.

Perplejos, ya estamos. Indignados, también. Pero todavía nos contenemos.

No rompan la baraja. No alteren las pautas de la convivencia. Los que vulneran a la democracia siempre, al final, salen trasquilados.

Golpe de mercado

martes, 4 de diciembre de 2012

Los peores golpes de Estado son los imperceptibles, los que se identifican difícilmente al principio, no permitiendo la adopción de las medidas adecuadas en el momento oportuno. Los emboscados se disfrazan de tal modo -primas de riesgo, agencias de calificación, inversores opacos, "agujeros bancarios impunes",...-que es muy difícil reconocerlos hasta que la situación se torna prácticamente irreversible. No sólo debilitan al Estado y promueven desgarros sociales difícilmente restañables, sino que en su osadía llegan, ante la perplejidad e inacción ciudadana, a nombrar gobiernos sin urnas.

Con gran habilidad, consiguen alcanzar el objetivo de "menos Estado y más mercado". Se desprestigia a los políticos y a los parlamentos, sobre todo cuando existen mayorías que, sin mecanismos correctivos, producen sin pausa "leyes rodillo". El "golpe de mercado" logra sus propósitos de privatizar... hasta los propios partidos políticos.

Los responsables de las crisis -grandes consorcios financieros- están pasando la factura permanente a quienes aceptaron, en un momento histórico, sustituir los principios democráticos por las leyes del mercado y las instituciones internacionales por los grupos plutocráticos que tanto han dañado a Occidente. Se trata de una crisis sistémica que requiere liderazgos muy sólidos, capaces de dar explicaciones a los ciudadanos y diseñar con claridad las estrategias para el futuro.

Lo cierto es que, una vez "rescatados", han presentado situaciones de quiebra sin que se sepan las causas de los increíbles déficits acumulados. ¿Dónde ha ido a parar ese dinero? ¿Cuál es la situación real? ¿Quiénes fueron incapaces de advertir lo que estaba acaeciendo cuando hubiera sido posible todavía evitar o mitigar las gravísimas consecuencias?

De forma muy inaparente, como ha destacado Ignacio Ramonet, la privatización de lo público está llevándose a efecto, a pesar de que es con el dinero público y el sacrificio de la mayoría de los ciudadanos como se están intentando aliviar los dislates cometidos.

El "gran dominio" manda en buena parte de Occidente, aunque nada menos que América Latina, la India... se están escurriendo hábilmente de los últimos coletazos de los "globalizadores".

La solución es una democracia auténtica, que produzca rápidamente una refundación del Sistema de las Naciones Unidas y la inmediata eliminación de los G8 y G20; que reforme de manera inmediata los Tratados de la Unión Europea, de tal modo que la federación política, económica y fiscal permita, junto a una seguridad autónoma, el adecuado funcionamiento de la Unión, para que 27 países no tengan que danzar necesariamente al ritmo que le marca uno sólo; y a escala local, en todos aquellos países en que los parlamentos se están desacreditando por seguir normas de representación popular ya superadas, y en que los gobiernos no cumplen los programas que recibieron en las elecciones el apoyo popular, fortalecer la democratización basada en los valores éticos que se sustituyeron por los mercantiles para poder hacer frente, con los consensos nacionales que son indispensables, a los desafíos presentes, poniendo en su lugar a los "golpistas", ya desenmascarados.

Sólo de este modo podrán contrarrestarse a escala internacional, europea y nacional los actuales "golpes de mercado"...