"Soluciones financieras innovadoras"

viernes, 28 de mayo de 2010

Considero que es absolutamente imprescindible aplicar de una vez por todas los mecanismos que permitan hacer frente, junto con una mayor responsabilidad de los Estados en la financiación del desarrollo y la cooperación internacional, a la calidad de vida de los segmentos menos favorecidos de la población mundial.

En los últimos años se están realizando interesantes propuestas e iniciativas, en este sentido:

Naciones Unidas, Nueva York, 20 de septiembre de 2004. Por iniciativa del Presidente Luiz Inácio Lula da Silva, se reunieron con él y el Secretario General, Kofi Annan, el Presidente de Chile, Ricardo Lagos; el de Francia, Jacq ues Chirac; y el Presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, para "aumentar de manera conveniente la financiación en favor del desarrollo".

También en el mes de septiembre se presentó el Informe del Grupo de Trabajo Técnico sobre Mecanismos Innovadores para Financiar la Lucha contra el Hambre y la Pobreza. Trata de la imposición sobre las transacciones financieras; sobre el comercio de armas; se refiere a la Facilidad de Financiación Internacional; derechos especiales de giro, activos de reserva internacionales emitidos por el Fondo Monetario Internacional; evasión fiscal y los paraísos fiscales; la mejora del efecto de las remesas; aportaciones voluntarias a través de las tarjetas de crédito; inversión socialmente responsable.

El 19 de septiembre del año 2006, el Presidente de la República Francesa, Jacques Chirac, propuso la creación de UNITAID, con el fin de "asignar a la adquisición o producción de medicamentos una parte ínfima de las inmensas riquezas generadas por la aceleración de los intercambios. Parte de los fondos de UNITAID proceden de una contribución de solidaridad sobre lo billetes del tráfico aéreo.

En el mes de septiembre del año 2008, UBUNTU presentó una propuesta a la reunión de Doha consistente en la creación de un Impuesto Global sobre las Transacciones de Divisas. Una vez más, la inoperancia de la Cumbre de Doha fue, por desgracia, tan patente como las anteriores de Monterrey, etc. A este respecto es especialmente relevante la presentación de David Hillman del Stamp Out Poverty, el 29 de noviembre de 2008: Financiación innovadora del desarrollo: de Monterrey a Doha, hacia un cambio de escala.

El Ministro de Asuntos Exteriores de Francia, Bernard Kouchner, publicó un artículo sobre "Financiaciones innovadoras" en "El País", el 17 de septiembre de 2009, donde se proponen distintas modalidades de recaudación de fondos para hacer frente a las necesidades crecientes del desarrollo, no atendidas como era previsible por los Estados.

Cabe destacar la Declaración de Dakar, sobre las fuentes innovadoras de financiación del desarrollo del Grupo Piloto sobre Contribuciones de Solidaridad a Favor del Desarrollo.

Los días 4 y 5 de marzo de 2010 ha tenido lugar en París una reunión sobre "Soluciones financieras innovadoras para el desarrollo", con el fin de intercambiar experiencias sobre nuevos mecanismos para la generación de recursos. Bernard Kouchner, Ministro de Asuntos Exteriores, y Christine Legarde, Ministra de Economía, Industria y Tecnología de Francia asistieron personalmente, destacando la importancia del Impuesto sobre las Transacciones Financieras, iniciadas en 2008, en el contexto del Grupo Piloto de Financiamiento Innovador para el Desarrollo. Asistieron muchos representantes del sector privado y de la banca y entidades financieras. Hubo acuerdo general sobre la necesidad de aplicar impuestos al sistema financiero.

Finalmente, quiero destacar la revisión realizada en la "UBUNTU Newsletter", publicada el mes de febrero-marzo de 2010, titulada "Una necesidad imperiosa y justa. Nuevos fondos de financiación para el desarrollo".

60 Aniversario de la Unión Europea (¿Unión?)

jueves, 27 de mayo de 2010

Queremos la Europa faro de la democracia, la Europa torre de vigía.

No la Europa deslocalizada.

No la Europa dependiente. La Europa del Atlántico Norte y Sur, del Mediterráneo, del Pacífico.

La Europa aliada de los EEUU, sí, pero con seguridad independiente y con su propia autonomía, bien visible a escala mundial.

"La paz mundial sólo puede salvaguardarse mediante esfuerzos creadores equiparables a los peligros que la amenazan", podemos leer en la Declaración de Schuman con la que se inició el largo recorrido de la Unión Europea hace 60 años. Ésta es la Europa que queremos. La que sabe que no hay nada que sea ineluctable, que no pueda cambiarse, que no pueda reinventarse, como el día 9 de mayo de 1950 hicieron Schuman y Monnet.

El Año Europeo de la Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social, el de 2010, se ha convertido en año europeo de desestabilización, de explotación, de zoco excluyente que cambió valores por dinero.

Hoy formamos parte de este barrio próspero de la aldea global en el que viven no más del 18% de los habitantes de la Tierra. Tenemos que abrir puertas y ventanas para ser solidarios, conscientes de la vergüenza colectiva que representan el hambre, la pobreza, la falta de servicios sanitarios e higiénicos, en tantos y tantos lugares del planeta.

La pobreza material de muchos tiene su origen en la pobreza espiritual de pocos.

Ésta no es la Europa de la Unión que pretendemos y que debemos procurar afanosamente cada día.

A las instituciones financieras que fueron "rescatadas" por el G-20 -plutocracia- en lugar de hacerlo por las Naciones Unidas -democracia- y que ahora desestabilizan al mundo, con noticias falsas, con evaluaciones sesgadas, con argucias de toda índole disfrazadas de "mercado"..., hay que juzgarlas como delincuentes.

Hay que poner fin a una economía irresponsable de especulación, de paraísos fiscales, de deslocalización productiva guiada por la codicia.

Y hay que poner en marcha mecanismos protectores de los segmentos más vulnerables de la población, con fuentes alternativas de financiación (como las tasas sobre transacciones electrónicas, cambio de divisas, tarjetas de crédito, etc.) y la fijación de una Renta Básica que permita a todos disponer de las compensaciones que les permitan alcanzar el salario mínimo interprofesional.

Y sobre todo -no me cansaré de reiterarlo- hay que pasar de una economía de guerra (3.000 millones de dólares al día) a una economía de desarrollo sostenible (energías renovables, producción de alimentos, agua, protección de la salud, medio ambiente, vivienda, transporte...)

Que nadie se engañe: la caridad más justicia, sí; la caridad sin justicia, no. Porque la solución está en el reconocimiento pleno y efectivo de la igual dignidad humana.

La sociedad civil debe comprometerse, pero no asumir responsabilidades que corresponden a los Estados. A sus gobiernos que, en un sistema democrático, son los representantes genuinos de los ciudadanos.

Y los ciudadanos ya no permanecerán como testigos impasibles, resignados...

El tiempo del silencio ha concluido.

Es tiempo de educación a todos los niveles.

Es tiempo de no distraerse.

Es tiempo de seguir, tiempo de "alzarse", como nos dice José Ángel Valente en uno de sus versos.

El desarrollo es cooperación y no explotación.

Es ayudas y no préstamos condicionados.

Es com-partir.

Es extender la mano y nunca más alzarla.

Es inventar los caminos del mañana.

Es incluir.

Es comprometerse.

Es involucrarse.

Es ser nosotros mismos construyendo, con nuestro comportamiento cotidiano, una cultura de paz. Con el espíritu solidario y fraternidad que establece el artículo 1º de la Declaración Universal.

¡Qué cosas hay que oír!

miércoles, 26 de mayo de 2010

“España está pagando muy cara la ilusión progresista”, declaró impertérrito el ex Presidente Aznar, que apareció en primera página del periódico ABC (28 de marzo) sentado y mirando fijamente al lector, con una media sonrisa. Es uno de los tres de las Azores, el único que sigue sin reconocer el inmenso error –y sufrimientos y muertes- que ocasionó aquella horrenda decisión…

No es España sino el mundo entero el que está pagando muy cara la desilusión de la globalización neoliberal, de las "burbujas", de las desregulación total, de la sustitución de los principios éticos y la justicia social por las leyes del mercado, de la marginación del multilateralismo y su sustitución por grupos plutocráticos, de la debilitación del Estado-nación traspasando no sólo recursos financieros sino también responsabilidades políticas, a grandes consorcios privados.

Al Sr. Aznar le ha disgustado profundamente que los progresistas de los EEUU hayan conseguido, después de 60 años, que la sanidad se haga extensiva a todos los ciudadanos; que más de 30 millones de norteamericanos, los más pobres y vulnerables, tengan acceso por fin a los servicios médicos, aunque pese a las grandes corporaciones aseguradoras.

Ya no nos dejaremos engañar otra vez, por mucho poder mediático que se movilice en favor de fórmulas que, además de desilusión, han producido enormes desgarros sociales y han favorecido la extensión de una economía de especulación y de guerra, deslocalizando hacia el Este la capacidad productiva. Ahora queremos que sean todos los seres humanos y no sólo los que viven en el barrio próspero de la aldea global los que se beneficien del progreso. Ahora queremos la erradicación de la pobreza y del hambre. Ahora queremos menos máquinas de guerra y más desarrollo global sostenible: energías renovables, alimentación, agua y sanidad para todos, cuidado del medio ambiente…

Ya no permitiremos que los mismos que nos han “desilusionado” tan profundamente, pretendan fijar de nuevo los rumbos de la humanidad.

Día Internacional de África

martes, 25 de mayo de 2010

Estamos en deuda, desde hace siglos, pero sobre todo desde que, en la década de los ochenta, los países ricos tomaron las riendas de la gobernación mundial y se olvidaron de las promesas de ayuda y cooperación internacional…

Cambiaron la ayuda por préstamos concedidos en condiciones draconianas.

Cambiaron la cooperación por la explotación.

Cambiaron un sistema multilateral por un sistema plutocrático (G7, G8…).

Cambiaron los principios democráticos por las leyes del mercado.

Cambiaron un proyecto de desarrollo global por una economía de especulación y de guerra.

Los corruptores acusaron a los corruptos quienes, como es lógico, no merecían ser subvencionados!

Ha llegado el momento de “Nosotros, los pueblos…”, de la sociedad civil que ya no permanecerá en silencio.

Ha llegado el momento de las ONGs y de las instituciones del Sistema de las Naciones Unidas, las manos y las voces juntas, reduciendo grietas y restañando heridas.

Ha llegado el momento de la escucha de África: hacer lo que la sabiduría inmensa de África nos diga que necesita.

Ha llegado el momento de exigir a Europa que cesen las actividades de las multinacionales que esquilman caladeros, explotan de forma indebida y sin compensaciones el coltan en la zona de los kivi, del Congo, la bauxita en Guinea-Conakry … o el oro con procedimientos extractivos que lesionan de forma gravísima el medio ambiente.

Ha llegado el momento de exigir a todos las grandes firmas de comunicación –grandes beneficios que irán a parar a muy pocas manos- que distribuyan generosamente en África los colosales “retornos mediáticos” del Mundial de Fútbol.

Sí: hoy, Día Internacional de África, es el momento de reiterar nuestro amor a este continente que tanto ha dado a cambio de tan poco. Y pedirles perdón. Y agradecer la sonrisa que, a pesar de todo, nos prodigan.

Ha llegado el momento de cumplir lo que escribí en la Isla de Goreé el mes de julio de 1992:

… Su última

mirada…

a aquella isla,

a aquella tierra

suya

que ahora navega

en olas de desamor

hacia ignoradas costas.

¡Cuánto

queremos hoy

esa última

mirada viajera

desenraizada

brutalmente

de su paisaje,

de su casa,

de sus riberas.

Fueron vendidos

al peso.

Debemos

pagar la deuda.

¡Qué valientes son con los pequeños!

lunes, 24 de mayo de 2010

Todos juzgando a Cuba… A la Cuba que termina en Guantánamo. A la Cuba de la carencia de libertades públicas, pero donde las Damas de Blanco pueden hacer declaraciones y manifestaciones, y las cámaras filmar las huelgas de hambre y la resistencia. A la Cuba de los cansados de tanta espera y de los que todavía aguardan.

A la Cuba que no se ha hincado ante el poder omnímodo que la ha sometido a inacabables embargos. A la Cuba de los niños escolarizados y del desarrollo sanitario que le permite exportar maestros y médicos. A la Cuba que debe evolucionar, como deben hacerlo, urgentemente, países “democráticos” del mismo hemisferio que tienen tasas de desescolarización de más del 40%; y emigrantes a mansalva porque sus riquezas se hallan explotadas por unas cuantas empresas multinacionales; países que están obligando a la remilitarización del continente poniendo bases norteamericanas en sus fronteras…; países donde existe la pena de muerte y la arbitrariedad –hasta hace poco, pero también aplaudida por los ultras- de invadir países a su antojo; y de tener buena parte de los medios de comunicación en las mismas manos...

¿Dónde están los reporteros que puedan filmar lo que sucede, por ejemplo, en el interior de China? ¿Cuántas penas de muerte han tenido lugar allí en el último año? ¿Cuántos están en huelga de hambre?.

Insisto en que soy muy consciente de lo que debe cambiarse en Cuba. Empezando por el último discurso del Presidente Raúl Castro. Pero me resisto a mirar siempre en la dirección que marcan los grandes estrategas mediáticos de la Tierra. Me gusta hacer precisamente lo contrario…

Maestros, sacerdotes… Se trata de separar la cizaña, no de tirar el trigo

jueves, 20 de mayo de 2010

A vuela pluma

III

Algún profesor que no actuó bien… y se critica inmerecidamente a todos los docentes! (más de 800.000 en España)

Sacerdotes que han delinquido… y ya ponemos a todos los sacerdotes de vuelta y media, olvidando –con independencia de nuestras creencias- a la inmensa mayoría que se entrega cada día, con un desprendimiento total al servicio de los demás.

No se merecen esta condena generalizada los religiosos que cumplen con vocación ejemplar su misión.

Es la jerarquía la que ha silenciado lo que no debería. La que no ha reaccionado buscando soluciones “humanas” a problemas seculares como el celibato obligatorio. Es la Iglesia del rito solemne, de las tiaras orladas de piedras preciosas al tiempo que habla de la erradicación de la pobreza… Es la jerarquía empeñada en invadir tantos campos del conocimiento científico en lugar de dedicarse al espíritu (que es lo suyo y falta nos hace).

Escribo esto en favor de los docentes que no merecen que una noticia –que siempre describe lo atípico, lo insólito- les oscurezca a todos.

Y por los creyentes de cualquier religión que no merecen que sus ministros sean todos juzgados por unas cuestiones que afectan sólo a unos cuantos, que deben ser tratados como delincuentes.

Se trata de separar la cizaña, pero de atender con gran cuidado el trigo.

Pabellones de conveniencia

miércoles, 19 de mayo de 2010

A vuela pluma

I I

Todos los barcos con banderas de Liberia, Panamá…

¡Qué vergüenza!... Todo falso, todo simulado, armadores, fletadores, aseguradores, reaseguradores…

Todo un montaje inmenso para evadir responsabilidades, para ganar más dinero –como corresponde a una economía de mercado!- a costa del medio ambiente, del fraude fiscal, de la transgresión de leyes internacionales.

Sólo con unas Naciones Unidas fuertes y dotadas de los recursos necesarios se podría hacer cumplir las normas y controlar estos dislates.

¿Malentendido?

martes, 18 de mayo de 2010

A vuela pluma

I

El 6 de mayo de 2010, el Sr. Rajoy dijo en el curso de una entrevista en “Onda Cero”: “Camps va a ser el candidato del PP en Valencia. Diga la justicia lo que quiera”.

¡Hablan tanto!, normalmente, en detrimento de la reflexión, de las propuestas alternativas.

Ahora resulta que fue “mal interpretado”. Hombre, no! Lo elegante sería decir, sencillamente, que no estuvo afortunado en su respuesta. Pero pasar la culpa a los oyentes… Decir valientemente lo que se piensa, es laudable. Decirlo atolondradamente y luego transferir la responsabilidad a los demás es incorrecto.

Decir lo que se piensa y pensar lo que se dice. Esta es la cuestión.

Garzón, juez mundial

lunes, 17 de mayo de 2010

Hace ya algún tiempo (1 de abril de 2010) escribí en este blog que si lograban sentar a Garzón en el banquillo se levantaría airoso. Por su renombre nacional e internacional, sabía que los malasaña locales no lograrían, obcecados en ensombrecer el pasado, en anular la memoria, sino iluminarlo y reavivarla, aupando todavía más al juez que, con gran coraje y lucidez, no sólo había procurado justicia en el presente y pretérito español, sino que había apuntado certeramente a los delincuentes y genocidas a escala planetaria.

Pretendían acabar con la brillante trayectoria del Juez Garzón y lo han enaltecido.

Se pasa con frecuencia al reconocimiento de "personaje mundial", cuando la muerte o el asesinato físico o espiritual truncan súbitamente su camino... y, también súbitamente, toda la Tierra aprecia y valora lo que han hecho, con la ventaja para los que perviven de disfrutar personalmente de ésta tan insólita consideración global.

A pesar de mi tristeza e indignación, estoy contento íntimamente, porque las manos sucias que querían marginar y vituperar a un gran juez español lo han convertido en un gran juez mundial, respetado por la inmensa mayoría de los españoles y, lo que es mucho más difícil, por toda la humanidad.

¿La especulación dirigiendo el mundo? ¡No!

viernes, 14 de mayo de 2010

Todos debemos arrimar el hombro para corregir tantos entuertos, pero empezando por los que más tienen. Por arriba, porque fue “arriba” donde más se ayudó, fue “arriba” el sector que más se benefició de la desmesura inmobiliaria y de la deslocalización productiva.

No se trata de España ni de Grecia. Se trata de Europa. Fue la “dólarzona” la que inició la debacle. Ahora –lo trataré pronto extensamente- pretende ser, de nuevo, la única referencia monetaria mundial.

La crisis fue, al principio, financiera. Luego económica. Ahora política… y, si no se detiene con firmeza en la instancia que debe prevalecer sobre todas las demás, devendrá una crisis social, de consecuencias muy graves.

Toda la UE debe rectificar y recobrar la “autoridad política”. Por ello ¡qué vergüenza que el Presidente de la CEOE proponga reducir todavía más la ayuda española al desarrollo… y que Caja Madrid proyecte reducir la asistencia social –que, por cierto, distingue a las Cajas de las otras instituciones bancarias! Ahora los “mercados” rescatados maniatan a los Gobiernos que les ayudaron… y los políticos reaccionan con incongruencias tan monumentales como los recortes que propone el señor líder de la oposición que tienen un monto similar al del “blindaje” anunciado hace unos días de un conocido banquero español.

Lo cierto es que el capital está condicionando las decisiones políticas de la UE!... que sacrifica el bienestar social en el altar del mercado. Todo esto sucede por haber sustituido los valores democráticos –justicia social, solidaridad, igualdad- por las leyes del mercado. Lo vengo advirtiendo desde hace 20 años. ¡Rescatemos ahora los principios!

Fue un grandísimo error que en noviembre de 2008 se ofreciera a Bush –elegido ya el Presidente Obama- el liderazgo de la salida de la crisis, porque –“free market, free trade”- lo encomendó al G-20 (grupo de los países más ricos) en lugar de haberlo dirigido de forma innovadora y valiente (para eliminar a los paraísos fiscales y establecer la apropiada regulación) a través de lo que podría haber sido la antesala de una gran renovación del Sistema de las Naciones Unidas, marginado precisamente al final de la década de los 80 por los “timoneles” del neoliberalismo.

Se “rescató” con ingentes cantidades a las mismas instituciones financieras que habían conducido, en muy buena medida, a la situación de crisis múltiple (económica, medioambiental, alimenticia, ética…) y que hoy, en lugar de contribuir a la solución definitiva imponen sus exigencias a los mismos que ingenuamente les ayudaron en su naufragio. Pero ambos se han olvidado de que la ciudadanía del año 2010 no es la de las anteriores “burbujas”. Ahora puede, en menos tiempo del que se piensa, influir decididamente en los acontecimientos, es decir, ahormar genuinas democracias.

Es preciso esquivar los últimos zarpazos de los “globalizadores”. Los poderes hegemónicos no quieren reconocer que su tiempo –largo, largísimo tiempo- ha concluido y que se inicia “un nuevo comienzo”, una nueva época en que serán “los pueblos…”, como tan anticipadamente anunció La Carta de las Naciones Unidas, los que tendrán en sus manos las riendas de su destino.

Y lo harán gracias a las nuevas posibilidades que ofrece la moderna tecnología de la comunicación para la participación no presencial. En pocos años, finalmente, irán construyendo los pilares de la democracia genuina a escala local, nacional, regional, mundial.

La economía de guerra y de especulación se sustituirá por una economía de desarrollo global sostenible; la paz se defenderá y mantendrá por las fuerzas de las Naciones Unidas, cuya Asamblea General tendrá una adecuada representación de la sociedad civil y el Consejo de Seguridad abarcará nuevas dimensiones “económica, medioambiental, sanitaria…”. En pocos años se fortalecerá, gracias a una amplia participación popular, liderada por las comunidades académica, artística, científica, intelectual…, la justicia a escala supranacional y las normas oportunas de regulación que permitirán llevar a los transgresores y delincuentes delante de los tribunales y terminar de una vez con los paraísos fiscales, las mafias y los tráficos (de armas, drogas, personas…).

Se reforzarán las uniones regionales: la Unión Europea, Africana, Latinoamericana…

Estamos viviendo tiempos fascinantes porque, por primera vez en la historia, la conciencia ciudadana permitirá terminar con los pocos dominando a los muchos, imponiéndoles sus designios de forma indiscutible (hasta el ofrecimiento sin rechistar de la propia vida).

Basados en noticias amañadas y en la circulación de rumores (tienen todavía en sus manos un gran poder mediático) pretenden seguir imponiendo sus fórmulas anacrónicas, su “mercado”, por la fuerza.

Han deslocalizado la producción hacia los países que permiten, por el bajísimo precio de su oferta, incrementar los beneficios, mirando hacia otro lado, sin tener en cuenta las precarias condiciones laborales de estos países. Es necesaria una nueva economía. Una nueva economía, sólo posible si a escala internacional existe la autoridad de un Sistema de Naciones Unidas dotado de los medios personales, financieros y técnicos que necesita para establecer los equilibrios que hoy son imprescindibles, al tiempo que se halla preparado para la interposición de fuerzas en los casos en que se violen gravemente los derechos humanos, y pueda coordinar rápidamente los esfuerzos internacionales para reducir, en el marco de un concepto mucho más amplio de seguridad, el impacto de las catástrofes naturales, ante las que hoy nos encontramos totalmente inermes (estamos preparados para la guerra con centenares de aviones, de barcos y submarinos… pero no lo estamos para hacer frente a inundaciones, terremotos, etc.).

No, el mudo no puede seguir el juego de quienes, con una falta total de sentido y obcecados por la codicia, hacen circular rumores y noticias falsas para que bajen los valores bursátiles y ellos compren y después suban estos valores y vendan… Todo especulación; que bajen y compro; que suban y vendo (y lo oculto y “lavo” en un paraíso fiscal). Y a todas éstas, las empresas sin medios para actuar, la fabricación confinada en algunos países “internamente” paupérrimos… Ha llegado el momento de plantarse. Hay que esquivar los últimos zarpazos. Favorecer que se desmorone este gigantesco andamiaje que, durante tanto tiempo, ha apuntalado el dominio masculino en la Tierra, que hoy finalmente se tambalea.

Somos conscientes de que el por-venir está por-hacer. No me canso de repetirlo, porque creo en ello. Depende de nosotros. De todas las manos juntas. De todas las voces juntas.

Hay que acabar de una vez con el tráfico de drogas

lunes, 3 de mayo de 2010

El narcotráfico es una auténtica y gravísima amenaza a la estabilidad mundial y, después de muchos años, está sucediendo lo peor: se acepta como un "efecto colateral" del sistema económico, de la desequilibrada y confusa gobernación global que ha situado al mercado como protagonista de la política planetaria, en lugar de los principios democráticos.

Mientras haya demanda habrá oferta. El alto precio no impide que quienes las buscan primero y las necesitan más tarde, dejen de obtenerlas. Hacen todo lo imaginable y lo inimaginable para conseguir las dosis que requieren.

Debería, como en el caso del alcohol, estar al alcance de quienes deciden consumirlas a precios asequibles, muy baratos. De este modo, rápidamente, las mafias dejarían de tener sentido. Sería un golpe decisivo, que haría que desapareciera una de las mayores lacras que afectan a la humanidad. Creo sinceramente que sería la única forma de eliminarlas. Ya está demostrado que no se eliminan por la fuerza.

Debería hacerse una gran campaña, en la que colaboraran todos los medios de comunicación, toda la sociedad implicada, para la mentalización contra la droga.

Puede objetarse -yo mismo lo hice hace años como neurocientífico- que se corre el peligro de aumentar el consumo... No es cierto. Ya se encargan los traficantes, de todos los niveles, de poner la droga a disposición de los consumidores, cada vez -como en el "botellón de drogas"- más jóvenes, más incautos.

La drogadicción produce efectos muy negativos en la salud -sobre todo en las neuronas-, en la voluntad, en la vida de los drogadictos... Y de los familiares. He visto tantas familias destrozadas, empobrecidas, arruinadas en todos los sentidos, por el consumo de drogas. En último término, por las dimensiones del tráfico y su impacto económico y delictivo, el consumo de drogas afecta a la sociedad en su conjunto.

Debemos dedicar a combatir la drogadicción el mismo esfuerzo que se ha destinado al consumo de tabaco, y que ahora trata de implicar a la sociedad para hacer frente al cambio climático, la pobreza o el SIDA. Es un gran reto. El bienestar de muchísimos seres humanos depende de un replanteamiento radical de esta cuestión, que no debe considerarse como una "afección" irremediable del mundo actual.

No hay que estigmatizar a los usuarios, sino involucrar decididamente a todo un sistema de gobernación que hasta ahora ha consentido tráficos de toda índole a escala supranacional, y que es incapaz de clausurar de una vez los paraísos fiscales. Mientras haya paraísos fiscales habrá tráficos, delincuencia internacional, mafias. Desde los más poderosos y ricos hasta los que en barrios y suburbios pobres y marginados constituyen los últimos emisarios de este sistema "capilar" maléfico.

A los adictos hay que ayudarles a que logren re-hacerse, a recuperar el dominio de sí mismos, para que vuelvan a "ser", para que vuelvan a vivir plenamente el misterio de su existencia. Y a los narcotraficantes hay que llevarles ante los tribunales y, todavía mejor, conseguir que desaparezcan haciendo que no valga nada su "mercancía".