Las manos de los Estados y de los más acaudalados "se cierran opacas", en expresión de José Ángel Valente, cuando nos escribía "desde un naufragio, sobre el tiempo presente, sobre la latitud del dolor, sobre lo que hemos destruido, ante todo en nosotros".
Leamos a Valente y seamos valientes alzando un gran clamor popular antes de que se nos caiga la cara de "vergüenza".
1 comentario
Me atrevería a decir que ésta es la generación humanamente más irresponsable en la Historia de la Humanidad vivida hasta aquí. Intuyo que nunca hasta hoy se había concebido una ¨DESCONCIENCIA¨ tan generalizada y a un nivel ya tan global. Seremos la vergüenza de los futuros historiadores; sé que en el futuro se echarán las manos a la cabeza cuando se analicen en detalle todas estas atrocidades.
1 de junio de 2016, 11:01..No sé si sirve para algo decir esto, pero lo único que sé, es que debemos luchar hasta el último aliento contra toda esta ilógica humana. Si nos adentramos en el egoismo intrínseco del hombre de Siglo 21, intuyo que hay que hacerle entrar ya en la razón de que ese ¨bienestar¨ se va a acabar si todo esto va a más. ...Este ¨sálvese quien pueda¨ definitivamente nos condena a todos. Si cada uno rema en una dirección diferente, el barco nunca avanza.
Un abrazo.
Publicar un comentario